21 sept 2008

El juego no distingue género.

Muchas veces escuche anécdotas en las que una madre reta a su hijo porque quiere un juguete con colores para nena. Entonces comienza uno a preguntarse, porque los niños deben privarse del juego. Porque la pintura es rosa...? También lo he visto con nenas que piden algún autito, maquinita, o juguete azul.
Es preocupante, cómo los mayores transmitimos preconceptos a nuestros hijos, vedándoles los juegos y a expresarse libremente. Creándoles un rechazo a los objetos y actividades del género opuesto. Como si esto fuera a influir en su sexualidad.
Quizá debamos cuestionarnos acerca de como se comportarán estos niños el día de mañana respecto al otro género. En general pasa que si una nena juega a la mamá esta bien, pero si un nene quiere un muñeco para acunarlo los abuelos, tíos y padres se miraran aterrorizados. Acaso la nena debe preparase para ser madre, y el nene no, para ser padre.
Creo que como formadores de niños debemos plantearnos cuales son las enseñanzas que harán de nuestros hijos buenas personas, capaces de vivir una vida plena con su pareja y sus hijos.